Para las industrias que trabajan con la energía neumática es importante conservar la calidad del aire comprimido que necesitan para sus múltiples funciones, es por ello que la existencia de la unidad de dispositivos de tratamiento se ha convertido en uno de los elementos fundamentales para esta labor y que sin duda no pueden faltar.
Entre los equipos de tratamiento de aire, el más conocido es la unidad de mantenimiento FRL (filtro, regulador y lubricador), compuesto por un filtro de aire comprimido que retira las impurezas. La válvula reguladora de presión encargada de mantener una presión estable y continua y por último el lubricador que se aplica en forma de Spray, permitiendo el incremento, rendimiento y vida útil de los equipos.
Entendiendo este breve concepto, las empresas han podido mejorar a gran escala la calidad del aire con la ayuda de los FRL, asegurando una mejor purificación del componente principal y a su vez proporcionando a los equipos neumáticos la capacidad de trabajar de una manera mucho más eficaz, al poseer un aire netamente limpio y libre de otros componentes que puedan perjudicar el buen funcionamiento de los dispositivos neumáticos (válvulas, cilindros, actuadores, etc.)
Un dato fundamental que debemos recordar, es que no todos los equipos neumáticos necesitan de la unidad completa debido a que algunas no requieren de la lubricación, por lo que solo trabajan con una unidad de mantenimiento FR (filtro y regulador) o incluso solamente el regulador en un único caso de que el aire de la línea se encuentre en perfecto estado.